Benítez falleció a los 27 años, luego de sufrir un paro cardio-respiratorio el 29 de julio de 2013, mientras se encontraba en su casa en Doha, Catar, país donde se había trasladado hacía veintidós días tras firmar con el club local El Jaish SC.
El jugador fue atendido en un hospital tras sufrir un fuerte dolor en el estómago. Minutos después, le ayudaron por un dolor en el corazón, pero falleció. Posteriormente al suceso, familiares aseguraron a los medios que no recibió atención médica de inmediato.
El 30 de julio, trascendió que la verdadera causa de la muerte del futbolista fue una peritonitis mal atendida, lo que le produjo la crisis cardíaca causante de su muerte. Finalmente se conoció mediante una primera autopsia en Catar, y luego se confirmó en una segunda realizada en Ecuador, que Benítez murió de causa natural debido a un problema congénito en la arteria coronaria, lo que complicó el bombeo de su corazón, provocando el malestar en su abdomen y sobre esfuerzo que terminó en su deceso. La Federación Ecuatoriana de Fútbol informó que este problema solo puede ser detectado post mortem, por lo que era imposible detectarlo en sus exámenes de salud hechos por los clubes a los que perteneció a lo largo de su carrera y que ningún método avanzado podría detectar, por lo que su muerte fue súbita de proceso prolongado
El jugador fue atendido en un hospital tras sufrir un fuerte dolor en el estómago. Minutos después, le ayudaron por un dolor en el corazón, pero falleció. Posteriormente al suceso, familiares aseguraron a los medios que no recibió atención médica de inmediato.
El 30 de julio, trascendió que la verdadera causa de la muerte del futbolista fue una peritonitis mal atendida, lo que le produjo la crisis cardíaca causante de su muerte. Finalmente se conoció mediante una primera autopsia en Catar, y luego se confirmó en una segunda realizada en Ecuador, que Benítez murió de causa natural debido a un problema congénito en la arteria coronaria, lo que complicó el bombeo de su corazón, provocando el malestar en su abdomen y sobre esfuerzo que terminó en su deceso. La Federación Ecuatoriana de Fútbol informó que este problema solo puede ser detectado post mortem, por lo que era imposible detectarlo en sus exámenes de salud hechos por los clubes a los que perteneció a lo largo de su carrera y que ningún método avanzado podría detectar, por lo que su muerte fue súbita de proceso prolongado